La eterna pregunta
Al considerar la filiación de Jesucristo, inmediatamente nos enfrentamos a una perplejidad. Al leer la Biblia en sentido literal encontramos que el Hijo es presentado a la vez como eterno y unigénito.
Cristo es eterno
Miqueas 5:2 Pero tú, Belén Efrata, aunque eres pequeña entre las familias de Judá, de ti saldrá el que ha de ser gobernante en Israel. Y sus orígenes son desde tiempos antiguos, desde los días de la eternidad.
Juan 8:58 Jesús les dijo: En verdad, en verdad os digo: antes que Abraham naciera, Yo soy.
Nota: La referencia a Yo Soy es acerca de uno que está en una condición de estado perpetuo.
Hebreos 1:8 pero del hijo dice: tu trono, oh Dios, es por los siglos de los siglos, y cetro de equidad es el cetro de tu reino.
Cristo es unigénito
Hebreos 1:2-4 ... en estos postreros días nos ha hablado por su Hijo, a quien constituyó heredero de todo, por quien asimismo hizo el universo; Él es el resplandor de la gloria de Dios. Es la imagen misma de lo que Dios es. Él es quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas, hecho tanto más excelente que los ángeles, cuanto alcanzó por herencia más excelente nombre que ellos.
Juan 1:18 A Dios nadie le vió jamás: el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le declaró.
Juan 3:16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado á su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
Juan 8:42 Jesús entonces les dijo: Si Dios fuese vuestro Padre, ciertamente me amaríais; porque yo de Dios he salido, y he venido; pues no he venido de mí mismo, sino que Él me envió.
Nota: la palabra salido significa proceder de, salir de.
Cuando mentalmente tratamos de unir estos dos términos, eterno y unigénito, no parecen encajar. Estos dos términos en conjunto son un componente clave para comprender al Hijo de Dios. Aquí es donde tenemos una línea común de razonamiento.
1. Cristo no podía venir del Padre como Hijo, porque entonces no sería eterno.
2. Esto significaría que hubo un momento en que Cristo no existió
3. Tal sugerencia indica una negación de la divinidad
4. Por lo tanto, Cristo no pudo ser engendrado en la eternidad.
En este punto, la palabra engendrado o, más concretamente unigénito se ve obligada a cambiar su significado. La simple lectura de la palabra unigénito es la siguiente:
Monogenes: único, el único, el unigénito, sólo (hijo engendrado). Así que hay dos maneras en que la gente suele tratar con engendrado:
5. Jesús fue engendrado en su encarnación (cuando vino a la tierra)
6. Jesús fue engendrado espiritualmente en la eternidad, lo que significa que asumió el papel de hijo, pero en realidad no es un hijo literal.
En cualquier caso, la identidad de Cristo deja de ser la de un Hijo verdadero y literal. Su verdadera identidad se desconoce al dársele el título de Segunda persona de la Deidad. No existe el concepto de relación entre el Padre y el Hijo, sino el de la igualdad de poder y la eternidad. Eso es todo lo que se puede realmente entender. Ambos son el poder eterno.
Así, en esta línea de razonamiento, la resolución de los términos Eterno y Unigénito es convertir a la verdadera identidad del Hijo unigénito en un misterio. Por misterio, me refiero a que su identidad como Hijo se convierte en un misterio.
Dentro de este proceso de razonamiento, no se ha intentado definir el término eterno o eternidad. Simplemente se hace la suposición que la eternidad es una expansión infinita de tiempo que dura para siempre.
Una de las cosas interesantes acerca de este proceso es que el tiempo termina siendo constante y Cristo es el que cambia. En este escenario, ¿Quién está sujeto a quién?
¿En qué nos basamos para hacer la suposición de que el tiempo es constante? ¿Qué significa la palabra bíblica “eterna” o “para siempre”?
De H5956; propiamente escondido, i.e. punto de desaparición; generalmente tiempo fuera de la mente (pas. o fut.), i.e. (prácticamente) eternidad; frec. adverbio (espec. con perposición pref.) siempre:- antigüedad, antiguo, continuo, eternamente, eternidad, eterno, largo, (principio del) mundo, pasar, perdurable, permanecer, perpetuamente.
El concepto bíblico de la eternidad es algo que está oculto, es tiempo fuera de la mente, lo que significa que está fuera del alcance de nuestras mentes. Si algo está oculto o está más allá del punto de fuga (un punto situado en el infinito), entonces no podemos trazar una línea en nuestras mentes.
La Biblia dice:
Deu 29:29 Las cosas secretas pertenecen al SEÑOR nuestro Dios, mas las cosas reveladas nos pertenecen a nosotros y a nuestros hijos para siempre, a fin de que guardemos todas las palabras de esta ley.
La Biblia define la eternidad como algo que está oculto, algo que no se nos ha revelado. Está más allá de nuestra comprensión. Imponer nuestro concepto de tiempo finito a la eternidad es un intento de penetrar en las cosas que Dios nunca pretendió que entendiésemos.
El concepto de tiempo es constante para nosotros como seres humanos. Si forzamos este concepto a la eternidad ¿no estamos proyectando las condiciones humanas a la Deidad? ¿es posible que esta sea una forma de idolatría para hacer del Hijo de Dios una extensión de nosotros mismos? Si vivimos en el tiempo, entonces el Hijo tiene que vivir en el tiempo, él debe ser como nosotros.
Es completamente absurdo medir a Cristo por algo que él ha hecho. La Biblia dice que todo fue hecho por Cristo y sin Cristo nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. Juan 1:3. Esto incluye el tiempo.
En lugar de convertir la identidad del Hijo de Dios en un misterio, ¿por qué no permitir que la eternidad sea un misterio? Si hacemos esto y nos restringimos a nuestra existencia finita, entonces los términos Eterno y Unigénito encuentran completa armonía. Sólo tenemos dificultad cuando pretendemos alcanzar el misterio de la eternidad, algo que Dios nunca nos ha revelado.
Me apresuro a añadir que el proceso de cómo Cristo se convirtió en Hijo es ciertamente un misterio. Entender como Dios hace cualquiera de estas cosas está totalmente fuera de nuestro alcance, pero estamos hablando de la identidad del Hijo. Esto no es un misterio, nos ha sido revelado por Dios, que Cristo recibió todo de Dios y que eso lo hace Hijo. Por otra parte Dios no nos ha revelado lo que la eternidad es o cómo funciona - es un misterio.
Esta es la única manera que podemos decir en verdad que Cristo es el mismo ayer, hoy y siempre. Debemos permitir que Cristo sea constante y que el tiempo y la eternidad sean alterable.
Fallar en esto causa la destrucción del Hijo Unigénito desde la eternidad y eso, amigos míos es exactamente lo que Satanás ha querido desde el principio.
Entonces, ¿dónde se coloca el misterio? En el término Hijo Unigénito o en la eternidad?